En el dinámico panorama del sector manufacturero en constante evolución, la mitigación del riesgo social ha cobrado relevancia como un pilar empresarial crucial que exige la atención del CEO moderno. Para abordar eficazmente este ámbito, los líderes no solo deben priorizar la mitigación del riesgo social, sino también defenderla. sostenibilidad humana—una iniciativa fundamental que implica que las empresas realicen contribuciones positivas al capital humano de la sociedad. Una encuesta reciente de Deloitte reveló que ocho de cada diez directores ejecutivos se enfrentan a una creciente presión para comprometerse públicamente a mejorar las iniciativas de sostenibilidad humana.
Sin embargo, para gestionar con éxito el riesgo social, los fabricantes deben adoptar la sostenibilidad humana y pasar de un enfoque centrado en el negocio a una mentalidad centrada en las personas.
La sostenibilidad humana DEBE ser un aspecto clave de la mitigación del riesgo social
El Revista de Gestión de Riesgos Describe el riesgo social como “una manifestación de lo que sucede a nuestro alrededor y está impulsado por influencias internas de cada uno de nosotros: creencias, emociones, salud mental, miedos y ansiedades”. La falta de mitigación del riesgo social en el sector manufacturero puede generar diversos desafíos, como prácticas poco éticas en la cadena de suministro, problemas de control de calidad, accidentes laborales y responsabilidades ambientales. Todo esto puede, en última instancia, afectar... fuerza laboral 4.0 Volumen de negocio, eficiencia de producción y rentabilidad.
El CEO moderno reconoce activamente la importancia de identificar, evaluar y abordar las vulnerabilidades de riesgo social, a la vez que aboga por la sostenibilidad humana. Sin embargo, a pesar del creciente impulso en este aspecto del negocio, aún queda trabajo por hacer.
Del legado a lo moderno: cambiando la mentalidad del CEO
Jen Fisher, directora general jubilada de Deloitte, enfatiza que adoptar la sostenibilidad humana puede generar beneficios significativos para las empresas, pero lograr este objetivo requerirá una reevaluación de las prácticas tradicionales de liderazgo. «Los líderes deben abandonar la mentalidad tradicional centrada en extraer valor de las personas y, en cambio, adoptar el concepto de sostenibilidad humana, que puede impulsar el bienestar colectivo a largo plazo de las personas, las organizaciones y la sociedad», advirtió.
Los directores ejecutivos perspicaces reconocen la sostenibilidad humana, y un enfoque centrado en las personas es fundamental para la mitigación de riesgos sociales, ya que busca proteger la reputación de una empresa al tiempo que apoya a sus comunidades, empleados, grupos de interés y clientes. De hecho, un informe reciente de Deloitte destaca que la sostenibilidad humana está cobrando fuerza como una prioridad crítica, con más de tres cuartas partes de ejecutivos de alto nivel que indicaron que apoyarían la presentación de informes obligatorios de la empresa para mostrar públicamente sus métricas en esta área.
Es fundamental que todos los directores ejecutivos desarrollen una estrategia de mitigación centrada en el ser humano para protegerse de las vulnerabilidades del riesgo social. A continuación, analizaremos en profundidad los principales riesgos y delinearemos soluciones eficaces.
El futuro es brillante para el fabricante centrado en el ser humano
Puede parecer altruista, pero priorizar la sostenibilidad humana en las iniciativas de mitigación de riesgos sociales ofrece diversos beneficios, como una mejor reputación de marca y una mayor retención de empleados. Los directores ejecutivos que reconocen la naturaleza crítica del riesgo social pueden fomentar un compromiso empático que impulse a las comunidades, los empleados y las partes interesadas clave y, en última instancia, aborde el riesgo social con mayor eficacia.
Al adoptar las estrategias anteriores con la incorporación de nuevos enfoques de capacitación, como el de INCITÍndice de preparación para la industria inteligente/COSIRI Mediante un programa que permita a los directores ejecutivos del sector manufacturero mitigar el riesgo social y fortalecer su posición para el crecimiento a largo plazo y una mayor competitividad en el mercado global.